En la anterior entrega hice una presentación general del Ecosistema de Seguridad contra incendios y vida de NFPA©. Hoy veremos, también de forma general el primero de los componentes del mismo: la Responsabilidad Gobernativa.

Todos los niveles de Gobierno (Continentales, Nacionales, Autonómicos, Locales) tienen la responsabilidad de mantener a sus comunidades a salvo de incendios, riesgos eléctricos y de otro tipo. Deben crear un entorno político y Regulatorio en el que las leyes, las políticas y las prioridades de gasto estén vinculadas por las necesidades de seguridad pública y no por intereses particulares o ideológicos. Deben conocer los Riesgos de Incendio en sus ámbitos de actuación, para Regular con eficacia la Prevención, Combate y recuperación tras los siniestros. Esto es lo que los ciudadanos esperan de ellos. Parece muy obvio, pero normalmente no se da.

Afortunadamente disponemos de una serie de Regulaciones Gubernamentales bastante buenas, por supuesto con necesidad de mejora frecuente como en cualquier otra disciplina. Con esto quiero decir que somos afortunados en este sentido. Los Códigos como el RIPCI, RSCIEI y CTE, además de las regulaciones sectoriales para determinadas actividades parecen ser adecuadas para la mayoría de las situaciones.

Dicho lo bueno, pasamos a lo mejorable, que fundamentalmente son la falta de elementos de control para el cumplimento de las Regulaciones – en un tema tan sensible como la Protección Contra Incendios esto es fundamental -, así como la formación e información de una materia que no olvidemos tiene muy precaria posibilidad de aprendizaje y capacitación.

Los Técnicos, Diseñadores, Autoridades, Instaladores, Mantenedores y Usuarios, normalmente Competentes en sus ámbitos de actuación, cuando alguno, varios o todos ellos no tiene la capacitación suficiente, pueden provocar que la errónea aplicación de Buenas Regulaciones ofrezca resultados muy alejados de los objetivos pretendidos, desgraciadamente esto sucede en más ocasiones de las deseadas.

Los Gobiernos, si no disponen de suficientes técnicos con capacitación en este tema, deberían contar con el asesoramiento de entidades expertas para una mayor claridad y eficacia en sus decisiones.

El recientemente aprobado RSCIEI mejora la capacidad y normaliza el control y ejecución de los Proyectos que entre otras buenas novedades, permite el uso de tecnologías que hayan demostrado su eficacia y cuenten con certificaciones y/o aprobaciones, lo cual es muy importante en la actualidad pues están surgiendo riesgos que no son tratados de forma específica (baterías de Ion-Litio, Paneles Fotovoltaicos, revestimientos de los edificios, etc). Actualizar el Reglamento es un acierto en el Ecosistema.

El resto de los que formamos parte del Ecosistema, tras esta actualización, deberemos estar alertas (nunca está de más recordarlo) a la presencia y actividad de oportunistas, pícaros o directamente estafadores. Pero este tema formará parte de las entregas posteriores de esta serie.

Lo importante es, que dentro de sus competencias en el Ecosistema, los Gobiernos continúen ejerciendo la labor de control y adaptación de los Códigos no sólo de los riesgos, actividades o situaciones tradicionales sino también a aquellos nuevos que puedan aparecer. Por poner dos ejemplos claros donde sería deseable avanzar por la mejora y exigencia continua, están los edificios residenciales y las industrias relacionadas con la energía y el reciclaje, donde se está comprobando que las pérdidas son constantes y van en aumento.

Ejemplos de éxito

Para terminar por hoy, voy a mencionar dos casos donde la Responsabilidad Gubernamental ha sido exitosa en el Ecosistema:

Valladolid

El artículo 433.2 del Plan General de Ordenación Urbana de Valladolid prevé lo siguiente: En toda vivienda de nueva construcción, o en las obras que se realicen sobre viviendas ya existentes, se instalarán detectores de humo ópticos autónomos. Para las ya existentes se establece un periodo de cuatro (4) años desde la aprobación definitiva de este PGOU para su instalación. Por lo tanto, a partir del 31 de marzo de 2025 la instalación de los detectores de humo es obligatoria para todas las viviendas ya construidas del municipio de Valladolid, independientemente de su fecha de construcción. El PGOU se aprobó en 2021.

Recordad que el mayor número de víctimas mortales por incendio se producen en viviendas.

New York

La ciudad de Nueva York en vista del incremento de incendios que involucran baterías de Ion-Litio, dispone desde 2023 de una legislación específica que restringe entre otras muchas cosas, la venta, reparación y el alquiler de dispositivos de movilidad motorizados, -como bicicletas eléctricas y patinetes eléctricos- y de baterías de almacenamiento, que no cumplan la Certificación de normas de seguridad reconocidas. La vigilancia, control y sanción recae sobre los Departamentos de Bomberos y de la Policía en una labor conjunta. Además, ha implantado una fuerte estrategia de Educación Pública en seguridad ante incendios. https://www.nyc.gov/content/getstuffdone/pages/lithium-ion-batteries

Son dos ejemplos claros de que ante los problemas, si se quiere, siempre se puede reaccionar y mejorar.

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Redacción OPRA
Author: Redacción OPRA

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