El 28 de abril se celebra el día mundial de la seguridad y salud en el trabajo. Aprovechando esta efeméride consideremos algunos aspectos sobre la seguridad laboral.
Según el Avance estadístico de los accidentes de trabajo (enero-diciembre 2024 publicado por el Ministerio de Trabajo) los accidentes mortales de trabajo de 2025 han aumentado respecto del año 2024 por lo que se mantiene la tendencia al alza desde 2012. Analicemos algunos datos.

Diseccionando los datos
De las 796 muertes que recoge la estadística del Ministerio de Trabajo como accidentes laborales, 735 fallecimientos son personas empleadas por cuenta ajena, el resto (61) son empresarios, autónomos, jefes de la empresa.
De los 735 fallecimientos de trabajadores asalariados, 145 muertes han ocurrido fuera del centro de trabajo y de la jornada laboral por lo cual nos quedan 590 víctimas mortales relacionadas directamente con la actividad estrictamente laboral, muertas en su empresa durante la jornada laboral. Pero, de estas víctimas, 266 han muerto por causas naturales, infartos, derrames cerebrales, etc., cuya responsabilidad no es imputable a la actividad profesional o al empresario por lo cual nos quedan 324 víctimas mortales.
El resultado es que “stricto sensu” han fallecido 324 personas por accidente de trabajo en España en 2024, que son menos de la mitad de las alarmantes cifras oficiales. Parece que hay una intencionalidad es aumentar o aparentar que hay muchos más accidentes de trabajo de los que realmente hay y en especial en algunos sectores obsesionados en culpar a la empresa y al empresario de todos los accidentes.
El caso es que esa es la realidad de las muertes por accidente de trabajo en España, 13 veces menos que por caídas accidentales, 5 veces menos que por accidentes de tráfico, 3 veces menos que por envenenamientos por medicamentos y drogas de abuso, 2 veces menos que por ahogamientos. Y sin embargo existen determinados intereses que las llevan constantemente a las portadas de los medios de comunicación.
Estrategias de prevención
Tenemos pendiente avanzar mucho en prevención de accidentes del trabajo, pero considero que algunas estrategias no son adecuadas:
- Inflar el número de accidentes y hacernos trampas en cuanto al cómputo no es adecuado.
- Los accidentes in itinere no son accidentes del trabajo. Que esos accidentes sean objeto de protección para el trabajador, no tiene que conllevar que se computen como accidentes laborales.
- La prevención de accidentes y la salud son dos disciplinas diferentes que no han de ser mezcladas.
- Y sobre una nueva Ley de PRL, mi opinión es que una Ley de prevención para prevenir los accidentes en los cientos de gremios y en los miles de actividades profesionales con las peculiaridades que encierra cada puesto de trabajo, solo puede tratar generalidades. Tiene que haber reglamentos de seguridad por gremios o actividades.
- El futuro de la prevención de los accidentes en el trabajo es implantar la cultura de seguridad o cultura de la prevención y eso no lo va a hacer el Congreso de los diputados aprobando una Ley en las Cortes.
Otro día habrá que hablar de la verdad sobre los accidentes laborales en España.