Con cierto retraso, por fin, el Instituto Nacional de Estadística de España acaba de publicar los datos estadísticos relativos a las causas de muerte del año 2021. En este artículo se da un repaso a la evolución de las principales causas externas de fallecimiento en el año 2021.
Autor: Javier Larrea. Presidente del Observatorio de Prevención de Riesgos y Accidentes
Publicación: Web OPRA www.opra.info • 26 de diciembre de 2022
Lo primero que llama la atención al observar los datos totales de muertes externas de mortalidad(1), de este año y compararlos con los del pasado año es que ha habido un incremento del número de muertes por causas externas. Se ha pasado de 16.078 muertes en 2020 a 16.831 víctimas mortales en 2021 que supone casi un 5% de incremento en un año, lo que no deja de ser una mala noticia, teniendo en cuenta que este número crece y crece en los últimos doce años. La cifra de 16.831 muertes es el valor más alto de los últimos quince años. Quizás algún día, alguien decidirá preocuparse de la prevención de accidentes y hacer algo, pero por el momento no parece que vaya a pasar.
Un hecho reseñable es que la diferencia entre la mortalidad femenina y la masculina se va acortando; en el año 2.000 las muertes de mujeres eran aproximadamente una tercera parte y ahora las muertes de mujeres se van acercando y ya suponen casi un 60% de las muertes masculinas.
Entre lo más destacable de las principales causas externas de muerte del año 2021 encontramos que los suicidios, las caídas y los atragantamientos, alcanzan su récord histórico de fallecimientos y que han aumentado las muertes por tráfico.
Tráfico
La caída de la mortalidad en los accidentes de tráfico en 2020 que tenía su explicación en la menor movilidad que hubo en el primer año Covid ha visto frenada su disminución en el año 2021, para desgracia de todos y para preocupación de las autoridades que en la Estrategia de Seguridad Vial 2030 se han comprometido a reducir a la mitad el número de muertes en accidentes de tráfico habidas en el año 2019. El aumento de 136 víctimas mortales en 2021 ha supuesto un nada desdeñable 9,3% de incremento respecto a 2020 en estas muertes. Se puede destacar que el 85% del aumento de estos fallecimientos se ha producido entre los varones accidentados, lo que debería mostrar a las autoridades responsables de seguridad vial hacia dónde deben dirigir el foco de sus campañas de prevención. En un próximo artículo analizaremos con mayor minuciosidad las estadísticas de accidentes de tráfico, pero así de pronto no parece que la medida de reducción de la velocidad a 30 km/h en la circulación de las ciudades haya producido el fruto esperado en la reducción de víctimas.
Suicidio
Desde hace años la primera causa externa de muerte en España son los suicidios y en 2021 también lo ha sido. Los suicidios ocupan el primer puesto de los fallecimientos por causas externas desde el año 2008 en que se alcanzó la cifra de 3.500 suicidios anuales por primera vez en la historia. Si bien en 2021 ha habido un pequeño crecimiento del 1,6% sobre 2020, lo noticiable es que se ha batido el récord, y que con 4.003 muertes se ha superado la cumbre de los 4.000. Los suicidios son mucho más frecuentes entre los varones resultando que 3 de 4 suicidios son llevados a cabo por hombres.
La sociedad no es consciente de que una de cuatro personas fallecidas por las causas analizadas en esta estadística se produce por suicidio.
Caídas
Otro dato llamativo es que las muertes por caídas accidentales con 3.655 sigue su evolución ascendente imparable batiendo un nuevo récord histórico. Las caídas son desde 2012 la primera causa de muerte accidental en España, la segunda causa de muerte externa después de los suicidios (los suicidios no son muertes accidentales), sin que parezca que nadie vaya a ponerse a pensar en cómo frenar esta sangría que afecta principalmente a las personas mayores de 65 años.
Ahogamientos y atragantamientos
La causa que según la clasificación del INE ocupa el tercer puesto es la de los ahogamientos y atragantamientos con 3.504 muertes, situándose inmediatamente detrás de las caídas. Esto es debido a que esta clasificación viene determinada por el CIE-10(2) que agrupa a los ahogamientos y a los atragantamientos. Pero, segregando cada una de las causas observamos que 510 muertes corresponden a los ahogamientos y sumersión accidentales (402 en 2020) y el resto, 2.994 a otros accidentes que obstruyen la respiración (2.511 en 2020).
Más de 100 ahogados más que el año anterior, un 27% de aumento; el salto que ha dado esta causa en un año produciría escalofríos a cualquiera que se sintiese responsable de estas cifras. El caso es que en España no hay nadie responsable de la prevención de accidentes en la sociedad (tampoco en las CCAA, ni en los ayuntamientos). El Ministerio y la Consejerías de Interior o las Concejalías de seguridad piensan que esto no va con ellos. Los alcaldes deben pensar que la seguridad de los vecinos es competencia de otra administración. Y así nos va. Mientras tanto una absurda federación deportiva, la Real Federación Española de Salvamento y Socorrismo desempeña funciones que nunca le deberían corresponder y que deberían estar en manos del Ministerio del Interior. El salvamento y socorrismo ha de ser una actividad profesional seria (mucho más que un deporte) en manos de las administraciones, pero de manera organizada, no de la forma caótica en la que se prestan estos servicios actualmente en los municipios.
Otras causas
En el gráfico mostrado debajo de estas líneas se representa la evolución de las causas que yo llamo de segunda magnitud, las que arrojan menos de 1.000 muertos anuales. En estas causas: envenenamiento por drogas, otros accidentes del transporte, homicidio, otros envenenamientos accidentales, e incendios, no hay demasiadas novedades. Veámoslas de una en una.
Envenenamiento por drogas y psicofármacos
En el año 2021 con 959 muertes se produce un ligero descenso del número de muertes de 2020.
Otros accidentes del transporte
Aunque haya sufrido un pequeño repunte en 2021 con 286 víctimas mortales, los accidentes del transporte entre los que se encuentran los ocurridos en el tráfico marítimo y fluvial, aéreo y transporte ferroviario, son un tipo de accidentes que está viendo reducir su siniestralidad; desde hace muchos años se mantiene por debajo de las 300 muertes anuales.
Agresiones, Homicidios
Se mantiene la tendencia a la disminución de este tipo de muertes y con 283 muertes se queda muy cerca del mínimo histórico de 275 muertes por homicidio que se produjo en 2018.
Incendios
Se ha producido una ligera oscilación al alza. Con 204 muertes por fuego y humo en 2021 (179 en 2020) se rebasa la barrera de los 200 fallecimientos que no se superaba desde el año 2008. No obstante, a pesar de la repercusión social que suelen tener los incendios y sus víctimas, los incendios son una de las causas que produce menos muertes accidentales en España, que sigue siendo uno de los países más seguros del mundo desde el punto de vista de la protección contra incendios(3).
Otros envenenamientos
En este epígrafe se catalogan las intoxicaciones alimentarias y los envenenamientos accidentales con cualquier tipo de sustancias. En los últimos años se observa una tendencia a la baja de estos envenenamientos y este año con 160 muertes por esta causa es la cifra más baja de los últimos 20 años, disputando el puesto de la causa que menos muertes produce a los incendios.
Hasta aquí el resultado de un primer análisis de los datos recién publicados. Si sigues esta web podrás leer los próximos artículos más detallados en el que se analicen por separado cada una de las causas de muerte accidental.
(1) Se entienden como muertes por causas externas de defunción las causas no naturales, aquellas que producen la muerte de una persona y no están clasificadas como enfermedades. Pueden ser intencionales como el suicidio o el homicidio y no intencionales como las muertes accidentales (tráfico, ahogamientos, caídas, incendios, envenenamientos, etc.).
(2) Están recogidas en el epígrafe 9º (900-102) de la Clasificación Internacional de Enfermedades 10ª revisión (CIE-10) de la OMS. Hay que tener en cuenta que en este epígrafe el INE registra las muertes por Ahogamiento, sumersión y sofocación accidentales, es decir que recoge tanto los ahogamientos en el agua como las sofocaciones por atragantamiento, lo que suele inducir a confusiones no solo a algunos medios a la hora de publicar noticias sobre esta causa de muerte sino también entre algunos profesionales, ya sean del mundo del socorrismo acuático o de la medicina de urgencias al atribuir la suma de las víctimas de ambos accidentes (ahogamientos y atragantamientos) a uno de ellos.
(3) Es una curiosidad que por primera vez en la historia los datos del números de muertes por incendios del INE coinciden con El Informe de víctimas de incendio elaborado por APTB y FUNDACIÓN MAPFRE 2021.
Buenos días,
Muchas gracias por el artículo. Entre todos los datos que se exponen, y aunque ya era consciente de la cifra de suicidios, sorprenden los datos de mortalidad relacionada con los ahogamientos y caídas. No era consciente de que esas cifras son muy altas.
Un saludo.
Sí, Rubén.
Desde hace unos pocos años cuando el INE hace públicos los datos de mortalidad, todos los medios dedican amplias informaciones sobre los suicidios, como si lo hubiesen descubierto de repente, pero de las caídas nadie habla. Así como los suicidios son las muertes ocultas y silenciadas porque nadie quiere hablar de ello, y los medios ocultan cualquier información sobre ello (creo que es muy negativo pues de lo que no se habla no existe), a los falleciemitnos por caídas yo les llamo las muertes invisibles, pues son desconocidas. Se producen de una en una y solo se enteran los servicios de urgencia, el forense y los familiares. Aunque debiera ser un problema social de primera magnitud resulta absolutamente ignorado. Por hacer una comparación políticamente incorrecta: ¿Cuántas páginas se dedican a la información de las alrededor 50 muertes anuales por vinolencia de género, en comparación con la información publicada por las más de tres mis muertes por caídas?
Sin comentarios.