Con este título comienzo mi blog personal en el portal del Observatorio de Prevención de Riesgos y Accidentes -OPRA-. En este blog iré colgando los artículos que tengan que ver con los fines y objetivos de ese Observatorio.
Mi trayectoria profesional y mi experiencia en el mundo de los incendios y la prevención me llevó a elaborar para la Fundación Mapfre el primer Estudio de Víctimas Mortales de Incendio en el año 2010. Fue gratificante poder contar con unos datos que tenían en casi todos los países de Europa y no disponíamos en el Estado español. Cuando en representación de la APTB me correspondía asistir a los foros internacionales de incendios y bomberos y algunos ponentes extranjeros proyectaban sus diapositivas con los datos comparativos de los incendios de Europa y de otros países, me avergonzaba que las casillas de incendios y víctimas de incendios en España figurasen en blanco, así que cuando la Fundación Mapfre me propuso abordar ese estudio no lo dudé y me puse manos a la obra.
Este estudio lo elaboré durante cuatro años seguidos y la Fundación Mapfre continúa realizándolo con la APTB, lo que me produce una enorme satisfacción al saber que la tarea que inicié con mucha dificultad en su inicio continúa viendo la luz año tras año. Resulta grato saber que prácticamente todos los servicios de bomberos se han implicado en una cuidadosa recogida de datos sobre las víctimas mortales de incendios con los que obtener un informe más riguroso. También se ha avanzado en que los medios de comunicación recogen cada vez con más detalle todos los aspectos relacionados con los incendios con víctimas mortales, sus circunstancias y sus causas.
El análisis de las muertes por causas externas que publica el Instituto Nacional de Estadística -INE- de España anualmente, me llevó a estudiar las otras causas de muerte accidental y enseguida me di cuenta de que los incendios son la causa accidental que menos víctimas mortales produce en España. Este hallazgo y mi espíritu prevencionista me hizo dirigir mis pasos hacia el estudio pormenorizado de aquellos accidentes que causan más muertes. Mi reflexión fue que, si las caídas accidentales producen 20 veces más muertes al año que los incendios, o si los atragantamientos producen 15 veces más personas fallecidas que los incendios, y sabiendo que de estos accidentes y de su prevención no se preocupa prácticamente nadie, parece razonable dirigir un mayor número de atención y esfuerzos hacia su prevención.
Eso es precisamente lo que pretendo realizar desde este blog, contribuir al portal de este Observatorio de Prevención de Riesgos y Accidentes para generar una mayor conciencia social sobre estos accidentes con el fin de reducir su número, el número de víctimas y atenuar sus consecuencias.
Las organizaciones públicas que se autodenominan de seguridad suelen utilizar el término de seguridad de una forma bastante restrictiva y por ejemplo una concejalía que se denomina de “seguridad ciudadana” suele limitar sus actividades a la prevención del robo y del homicidio, y en el mejor de los casos se encarga de Bomberos y Emergencias y Protección civil, primando la actuación en caso de accidente en vez de intervenir en su prevención.
Las Agencias de seguridad que han creado algunas CCAA se ocupan de unas pequeñas parcelas de la seguridad dejando de lado la mayor parte de las causas que causan las muertes accidentales a los ciudadanos que teóricamente deberían proteger. Tienen mucho camino por andar para ser verdaderas agencias de seguridad que protejan a los ciudadanos de todos los riesgos que les amenazan.
Hay mucho que avanzar: paso a paso.