En los meses más fríos del año se acumulan la mayor parte de las víctimas mortales por incendio del año, pero en los años transcurridos del siglo XXI nunca habían muerto tantas personas por incendios en el mes de enero. Al elevado saldo de 39 víctimas mortales por incendio ha contribuido sin duda el fatal incendio de la residencia de Moncada (Valencia) en la que han fallecido nueve personas mayores. Pero, dejando al margen esta desgracia, otras 30 personas han fallecido en este mes en incendios, todas ellas en el incendio de su vivienda.
Autor: Javier Larrea. Presidente del Observatorio de Prevención de Riesgos y Accidentes
Publicación: Revista Rescate Vial nº 65, (páginas 46-48) • 1er Trimestre 2022
Como se puede observar en el gráfico de la evolución de las víctimas mortales de incendio en los meses de enero desde el año 2000, el mes de enero de 2022 ha sido el peor del siglo XXI(1).
Todas las muertes por incendios en el mes de enero han tenido lugar en edificios. En el análisis en detalle de las víctimas mortales de incendio de este mes de enero no se van a considerar los fallecimientos ocurridos el 18 de enero en la residencia de mayores de Moncada en que se han producido nueve muertes (casi la cuarta parte de las víctimas de todo el mes) pues su inclusión distorsionaría todos los resultados. Así pues, este artículo se centra en el análisis de las víctimas fallecidas en el mes de enero en incendios en edificios de vivienda.
Incendios en viviendas
Se pone el foco en las víctimas mortales de los incendios en los edificios de vivienda para que el análisis sea más homogéneo y además, como ya sabemos, es en estos edificios donde ocurren la mayoría de las muertes ocasionadas por los incendios. En el gráfico en el que se representan las víctimas mortales del mes de enero ocurridas en la última década se observa también que este año es el que ha producido mayor mortalidad en incendios de los últimos años (1).
Tipo de día en que suceden los incendios mortales
De las 30 muertes ocurridas, el día de la semana que más muertes concentró fue el sábado con nueve (30%) seguido del lunes con seis (20%). Tan solo dos muertes ocurrieron en domingo.
Clasificando los días en laborables, festivos y víspera de fiesta, 16 han ocurrido en día laborable, 10 en víspera de fiesta y 4 en festivo. Llama la atención que siendo el número de días festivos igual al de vísperas de fiesta, resulta que las vísperas de fiesta arrojan casi el triple de víctimas que los festivos. Este curioso resultado no tiene un valor significativo en una muestra tan pequeña, pero esta variable merecería la pena ser analizada en futuros estudios de incendios en viviendas.
Hora del día
Dieciocho de las 30 muertes (60%) tuvieron lugar en horas diurnas y doce (40%) durante la noche, contradiciendo esa idea tan extendida de que los incendios nocturnos son los más peligrosos y producen más muertes que los diurnos. Doce de estos incendios diurnos tuvieron lugar alrededor del mediodía y varios de ellos tuvieron lugar en la cocina.
Distribución geográfica de los incendios
Por CCAA, la distribución de las muertes por incendio es muy irregular, pero como ya suele ser habitual, Andalucía está a la cabeza con nueve de las víctimas, que supone el 30% del total. Aunque Andalucía solo supone el 18% de la población española, el porcentaje de muertes por incendio en vivienda siempre está por encima de este porcentaje en los últimos años. El segundo puesto lo ocupa Cataluña con 5 víctimas seguida de Valencia y Baleares con 3 víctimas mortales.
El trágico ranking por provincias lo encabeza Barcelona con cuatro fallecimientos, seguida de Jaén, Granada y la Isla de Mallorca con tres muertes cada una.
Tamaño de la población
En cuanto al tamaño del municipio donde se produjeron los incendios mortales, 22 muertes (73%) han ocurrido en ayuntamientos de menos de 50.000 habitantes, confirmándose la realidad que ya sabemos: que los municipios más pequeños son más inseguros desde la óptica de protección contra incendios. Seis de las víctimas corresponden a capitales de provincia, tres de ellas con una población entre cien mil habitantes y medio millón y otras tres en capitales de más de medio millón de habitantes.
Tipo de vivienda
Todos los fallecimientos se produjeron en incendios sucedidos en edificios de viviendas, si bien, uno de ellos sucedió en un espacio dedicado a taller mecánico junto a su vivienda. Este fue el único caso en que la muerte ocurrió por las quemaduras debidas a una deflagración producida al quemar algunos objetos dentro de un bidón.
El tipo de vivienda donde se han producido las muertes ha sido mayoritariamente unifamiliar, ocurriendo 17 muertes (57%) en este tipo de vivienda. También ha habido dos fallecimientos en infravivienda. Cruzando estos datos con el tamaño del municipio nos encontramos con que 15 de las muertes, o sea la mitad de todas las víctimas se han producido en viviendas unifamiliares que se encuentran en municipios de menos de 50.000 habitantes.
Planta del edificio
Diecinueve de las víctimas mortales por incendio en este mes de enero (63%) se han producido en la planta baja de su vivienda. Que más de la mitad de las muertes en incendio sucedan en viviendas unifamiliares y que más de la mitad de las muertes ocurran en la planta baja debería ser objeto de preocupación para los legisladores de la PCI.
Tan solo ha habido una víctima por encima de la sexta planta. Como ya deberíamos saber la planta de la vivienda no es un factor a considerar en la probabilidad de originarse un incendio y es tan solo un factor a considerar en caso de evacuación del edificio y un factor más para las posibilidades de controlar un posible incendio por parte de los servicios de extinción de incendios.
Sexo y edad
En España se producen muy pocas víctimas por incendios entre nuestros niños y jóvenes y este mes de enero es una buena representación de lo que suele ocurrir cada año. El más joven de los fallecidos tenía 22 años y murió junto con su madre en una vivienda unifamiliar de Maracena, Granada, la mañana del 7 de enero, al parecer por el fuego ocasionado por un brasero o estufa. Como puede verse en el gráfico, en el rango de 30 a 64 años nos encontramos 12 víctimas (40%) que es un porcentaje superior al que suele darse a lo largo del año. (Se han utilizado los rangos de edad descritos por la Fundación Mapfre en el ATLAS de la accidentalidad en España: infancia=0-14; juventud=15-29; adultos=30-64; y mayores=65 y más. Aunque esta clasificación puede ser adecuada para algunos estudios, en aquellos fenómenos, como las muertes por incendio, en que se produce una elevada siniestralidad y mayor concentración de casos entre los mayores, soy partidario de dividir el rango de mayores en dos tramos de edad: jubilados=65 a 79 y mayores=80 y más).
Como suele ser habitual, la mayor parte de las víctimas tienen más de 65 años. Un total de 17 personas fallecidas son mayores de 65 años, teniendo doce de ellas (40%) más de 80 años.
Por sexo, aunque por lo general se suele encontrar una mayoría de hombres fallecidos en incendio, tenemos en este mes quince hombres y quince mujeres, una cantidad idéntica de hombres que de mujeres.
La soledad
Una de las variables de tipo social consideradas, es si las víctimas viven solas o acompañadas. Dieciocho de las víctimas mortales vivían solas, o sea el 60%; siendo mujeres, diez de ellas. Diez de las personas fallecidas que vivían solas murieron en viviendas unifamiliares.
No nos puede caber ninguna duda de que vivir en soledad es un factor de vulnerabilidad a tener en cuenta ante el riesgo de incendio.
Las causas de los incendios mortales
Aunque en muchos casos no se conoce la causa que ha propiciado el origen del incendio, en algunas noticias publicadas sobre estas muertes se apunta a braseros (que deberían estar prohibidos), estufas y calefactores.
Para los que se dedican a esto de los incendios es más de lo mismo: las mismas causas son las que provocan una y otra vez los incendios, y las mismas características de las víctimas. Las estadísticas que ya conocemos, volverán a repetirse año tras año con resultados parecidos a no ser que todos los implicados en la protección contra incendios hagan algo más: algo nuevo y diferente. No es suficiente con que quienes tienen la responsabilidad de la protección contra incendios hayan obtenido el conocimiento de los mecanismos que originan los incendios y de las pautas de prevención para evitarlos y se hayan convertido en expertos en su materia. Este conocimiento ha de ser divulgado. No son los expertos los únicos que deben saberlo, sino toda la sociedad.
Hasta que no consigamos que todos los ciudadanos, que toda la sociedad, conozcan a la perfección los riesgos de incendio en su hogar y las formas de prevenirlos nos queda mucho camino. Nunca me he cansado de repetir este mantra que muchos no quieren oír: la principal tarea de los miembros de los servicios de bomberos tiene que ser la prevención. Y no estaría de más que fuesen por las viviendas compartiendo lo que saben (ya se está haciendo en otros países).
Hallazgos
Este artículo es el fruto del repaso a la información aparecida en los medios de comunicación sobre los incendios con víctimas mortales sucedidos en el mes de enero, que por tratarse de uno de los meses más fríos del año arroja un elevado número de incendios fatales. Pero, no se trata de una investigación rigurosa ni tiene valor estadístico. La muestra es tan pequeña que no hay valores significativos para un estudio, pero, sin embargo, tiene el valor de reforzar las conclusiones que año tras año ofrece la APTB en el Estudio de víctimas mortales que realiza con la Fundación Mapfre.
Esos hallazgos no difieren de lo que ya se conoce, pero yo quiero destacar y poner el acento en un aspecto que sabemos que ocurre pero que está pasando desapercibido para los garantes de la prevención de incendios de los ciudadanos, que no sé muy bien quienes son, y de los legisladores de las condiciones de seguridad contra incendios que han de proteger a los ciudadanos. Lo voy a destacar, para acabar el artículo, así en mayúsculas y en negrita:
HAY QUE REGULAR DE MANERA URGENTE LAS CONDICIONES DE SEGURIDAD CONTRA INCENDIOS DE LAS VIVIENDAS UNIFAMILIARES Y EN ESPECIAL EN LOS PEQUEÑOS MUNICIPIOS.
(1) En estos gráficos no aparecen los datos de los incendios del mes de enero de 2021 pues aún no han sido publicados. Se dispone de los datos de 2022 agracias a una recopilación de OPRA realizada a través de las noticias publicadas en los medios (prensa, radio; TV y RRSS).
Enlace: https://www.publica.es/digital/rv-65.htm
El día 5 de febrero se produjo otra víctima mortal, tras varios días de hospitalización, como consecuencia de un incendio ocurrido en Oviedo el día 30 de enero. El varón de 54 años, fue encontrado en su vivienda en la primera planta del edificio con síntomas de intoxicación grave por humos y gases.
Con esta nueva víctima se contabiliza un nuevo fallecimiento por incendio, resultando un mes aún más trágico, ascendiendo a un total de 41 personas, elevando así el récord de muertes en enero.