La costumbre de caminar por las calles mirando al móvil impide ser consciente de los peligros que hay alrededor.
Es frecuente que quienes avanzan absortos en la pantalla del móvil, se tropiecen con árboles, farolas, señales de tráfico, bolardos o cualquier mobiliario urbano u obstáculo en su camino.
En este video del enlace, en el que el joven protagonista tuvo mucha suerte, se ve un claro ejemplo de este riesgo.