El martes 14 de mayo de 2024, a las 8 de la mañana, Unatz, un adolescente de 15 años, dio las instrucciones necesarias para salvar a su madre y a su hermana de 14 meses de un gran incendio en la planta inferior de su vivienda que amenazaba su vida. Gracias a las pautas de prevención aprendidas de un póster de Bomberos de Bizkaia y de un vídeo.
En la noticia publicada en los medios de comunicación (ver aquí), se cuenta lo ocurrido y la actuación del adolescente.
Acababa de desayunar y vio que subía un humo muy negro por la ventana, llamó al 1-1-2 advirtiendo del incendio y dirección y confinó a su madre y su hermana en la habitación más lejana del incendio cerrando las puertas. Fue a por las mascotas que también las llevó a la habitación. Por teléfono orientó al servicio de bomberos sobre el incendio y dónde se encontraban para poder ser rescatados.
Lo que pudo ser una tragedia acabó con final feliz, gracias a que según contó Unatz había aprendido qué había que hacer fijándose en el póster que habían repartido a las comunidades de vecinos desde Bomberos de Bizkaia y que había visto un vídeo en que aprendió la diferencia de propagación de un incendio cuando se dejan las puertas abiertas y cuando se cierran las puertas al fuego.
En este póster, que ha distribuido el Servicio de bomberos de la Diputación de Bizkaia a los edificios de vivienda de Bizkaia para colocar en los portales, es de donde el joven aprendió cómo hay que comportarse en caso de incendio en tu edificio.
Pero en el incendio de febrero del barrio del Campanar de Valencia, lo de confinarse en una habitación no funcionó. Lo mismo se puede aplicar a las torres gemelas de Nueva York.
Me gustaría saber si se han cambiado los protocolos en función de las características particulares de algunos edificios.
La clave está en refugiarse en un lugar desde la que puedas ser rescatado. Eso, en Valencia, funcionó para dos personas que se refugiaron en un balcón.
Encerrarse en un espacio totalmente interior es una mala idea.
Una de las mayores satisfacciones del trabajo de prevención. Salvar vidas. Espero que más bien pronto que tarde todos los compañeros, administraciones, empresas y ciudadanos se den cuenta que la prevención salvan más vidas que las que podamos salvar en muchas de nuestras intervenciones. Enhorabuena
Gracias, pero, no soy optimista, lo que es muy evidente para cualquiera que piense un poco no parece ser tan evidentes para gobernantes y administradores. Y ni tan siquiera para expertos responsables de servicios públicos. Veo continuamente a jefes de bomberos quejándose de que tienen poco bomberos y a ninguno quejándose de que no tienen personal dedicado ene exclusiva a la prevención. Todos sabemos que un bombero preventivo es el que más vidas salva, pero parece que eso no interesa a nadie. Los sindicatos luchan a muerte para aumentar las plantillas operativas y la prevención les importa un pimiento.
Saludos, Ojala cambie pronto esta tendencia!